sábado, 11 de agosto de 2012

Do The Evolution Baby

Vivimos en una época en que la ignorancia es un acto reflejo, lo que nos hace conceptualmente inocentes.
Esta es la época en la que la inocencia no se define como “el que carece de culpabilidad”, sino “el que no puede ser culpado”.

Vivimos en una época de sobreinformacion, y nos definimos por nuestra relación con ella. Y nuestra relación es un matrimonio soso y asexuado con hijos que duermen en nuestra cama y con mucho Tinelli en nuestra vida.

Hoy, para escribir esta columna, decidí informarme. Tenía una idea acerca de la desinformación de rebaño, pero nunca pensé que me iba a descubrir diciendo meeee *1.

¿Alguna vez intentaron poner “Genocidio” en Google?
No hay un puto centímetro cuadrado del mundo que no esté regado de sangre. No hay pueblo, nación, grupo de gente, Club Social y Deportivo que no haya sido víctima o victimario.

Solo en los últimos 200 años se cortaron orejas y manos de Onas, vendiéndolas a un libra la pieza. En el s.XIX los Tutsi conquistaron a los Hutu y les cortaron (literalmente) las bolas para adornar los tambores. En 1994, después de gobiernos coloniales, los Hutu en el poder se gastaron guita que no tenían y le dieron a uno de cada tres hombres un machete nuevo. Adivinen para que.
Entre 1932  y 1933 murieron entre 7 y 10 millones de personas en Ucrania. De hambre.
Y siguen…

Los motivos (posta, hay razonamientos sobre esto) van desde conflictos raciales, étnicos, políticos, religiosos hasta “porque trabajaban en oficinas” *2.

Tenemos la inocencia de la niñez. Somos inimputables.

Mañana cuando salgas a la calle, camino a donde sea que vayas, mirale la cara a cada persona que te cruces y devolve tu confianza en la humanidad. Recorda que el amor existe, que la amistad entre los hombres es posible, que todo va a mejorar y que la vida es un bien preciado e irreemplazable.

Después, si tenés ganas, sacate la venda de los ojos y pensa: Do The Evolution, baby.



*1: Sonido de ovejita.
*2: Si vivías antes del 17 de abril de 1975 en alguna ciudad de Camboya y de casualidad habías trabajado en una oficina, estabas condenado a muerte.

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